Paso 5
No todas las profecías son de Dios
Necesitamos darnos cuenta, y este es el paso número cinco, que no todas las profecías son de Dios, aunque puedan cumplirse. Vemos esto discutido en el capítulo 13 de Deuteronomio.
1 Si se levanta entre vosotros un profeta o un soñador de sueños, y os da una señal o un prodigio,
2 Y se cumplió la señal o el prodigio de que te habló, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos que no has conocido, y sirvámoslos;
4 En pos del SEÑOR vuestro Dios andaréis, le temeréis, guardaréis sus mandamientos y obedeceréis su voz, le serviréis y os uniréis a él.
5 Y ese profeta, o ese soñador de sueños, morirá; porque ha hablado para apartarte del Señor tu Dios, que te sacó de la tierra de Egipto y te redimió de la casa de servidumbre, para echarte del camino que el Señor tu Dios te mandó caminar. adentro. Así quitarás el mal de en medio de ti.
A veces la gente dice: "Bueno, eso debe ser correcto. Sucedió". Pero incluso bajo ciertas circunstancias cuando sucede, no es de Dios. ¿Por qué? Mira de nuevo el paso número dos. ¿Esta señal, maravilla o profecía te lleva a Dios o te aleja de Él? ¿Te hace ser más reverente con Dios, el Espíritu Santo y la Biblia, o te aleja del Nuevo Nacimiento y otras doctrinas fundamentales?
Si juzgáramos estas profecías, no estaríamos confundidos.
Es posible que hayas leído libros de personas seculares que afirman poder predecir el futuro. Pero no tienen el don bíblico de profecía, aunque "profetizan".
Alguien podría decir: "Vaya, a veces el 85 por ciento de lo que profetizan se cumple. Deben ser verdaderos profetas".
La Biblia habla aquí mismo en Deuteronomio 13 acerca de personas que profetizan y muestran una señal y un prodigio, y la profecía se está cumpliendo, pero el Señor dijo que a pesar de eso no es de Dios. ¿Por qué dijo que no era de Dios? Porque en lugar de llevar a la gente a Dios, los alejó de Él.
He leído algunos de los libros de los llamados "profetas" seculares. Puedo hablar con autoridad al respecto. La sangre de Jesucristo no se menciona ni una vez. El Espíritu Santo, si es que se menciona en absoluto, se menciona sólo en referencia a 1 Corintios 12, "... a otra profecía...", en un intento de decir que la persona tiene el don de profecía.
En sus libros aprenderás de dónde provienen su filosofía y creencias. Por ejemplo, en uno de esos libros, el escritor afirma que una vez se le acercó una serpiente en una visión. Cualquiera que conozca la Biblia sabe que la serpiente es un tipo del diablo. ¡Ningún ángel ha visitado jamás a nadie en forma de serpiente! Sin embargo, una serpiente vino y se entrelazó alrededor de esta persona y reveló ciertas cosas.
Yo mismo leí esa declaración; no es algo que alguien me haya dicho. No creo que sea correcto repetir rumores. Lo leí, todo el libro, palabra por palabra.
No todas las profecías son de Dios
¡Es cierto que las profecías genuinas de Dios no se usarán para predecir quién ganará una carrera de caballos o una elección política! Necesitamos juzgar y dividir correctamente la llamada "profecía".
Una persona que dice predecir el futuro dijo que cuando era pequeña, su madre la llevó a una adivina gitana que estaba acampada en las afueras de la ciudad. Esta adivina gitana se emocionó mucho al conocerla. "¡Oh!" jadeó, "Veo una especie de aura en ella. Ella es un don de Dios. Será usada de esta manera". Y pensó que era tan maravilloso que le dio a la niña su bola de cristal.
Entonces, cuando esta niña tenía 8 años, comenzó a consultar esta bola de cristal. Ella dice en su libro que cuando la gente acude a ella para pedirle consejo, a veces mira dentro de esa bola de cristal y ve las cosas en forma de visión. Si la visión aparece en el lado derecho de la bola de cristal, significa una cosa; si está en el lado izquierdo, significa algo más.
¡Jesús no miró dentro de ninguna bola de cristal! Los dones bíblicos de profecía y revelaciones del Espíritu de Dios no tienen nada en común con las bolas de cristal.
Gente como esta son médiums psíquicos. La gente buena se ha tragado la historia de que tiene el "don de profecía". Tienen un "don" de acuerdo, pero no es de Dios. No es del Espíritu Santo. Para recibir dones de Dios, tienes que ser un hijo de Dios. Y todos los que nacen en este mundo no son hijos de Dios.
Se ha engañado a la gente buena. Puedes comprender cómo alguien que tiene hambre de conocer a Dios, como algunas personas denominacionales, por ejemplo, buscaría a Dios, sin conocer los hechos, y podría seguir a un "profeta" o adivino. Esa es la razón por la que hago sonar esta alarma.
Gente de buena reputación me ha dicho que una clase de Biblia para adultos en cierta iglesia denominacional recibió un libro de uno de estos médiums psíquicos y lo leyó. El pastor comentó: "Esto debe ser de lo que el Señor está hablando en Primera a los Corintios: el verdadero don de profecía". Entonces estudiaron ese libro.
Conozco algunos predicadores pentecostales y personas que han dicho exactamente lo mismo. ¡Estoy horrorizado! ¡Estoy alarmado! Los cristianos deberían poder discernir estas profecías. Deberían poder saber si tienen razón o no.
Como vimos, la Biblia dice que puedes juzgar por la dirección que toman estas cosas. La Biblia dice que si surge un profeta o un soñador de sueños entre ustedes, y él profetiza ciertas cosas, o les muestra una señal o un prodigio —y sucede— no deben seguirlo si los lleva tras otros. Dioses. (En otras palabras, si te aleja de Dios, las Escrituras y lo que es correcto, no lo sigas, incluso si la profecía se cumple. En cambio, hazte la pregunta: "¿Me lleva a Dios o me aleja de ¿Él?".
Uno de estos médiums psíquicos estuvo una vez en Dallas al mismo tiempo que yo estaba allí dando un seminario. Habló en un club y recibió mucha publicidad debido a su libro superventas Un reportero que estaba presente escribió que después de su charla, este medio le dijo a cada uno de los miembros del club algo sobre ellos mismos. A veces tomaba sus manos para obtener las "vibraciones" adecuadas, como lo llaman. (Tengo miedo a las vibraciones. Creo en las revelaciones del Espíritu Santo).
Actuando como un médium psíquico, es una adivinación en cierto sentido, esta mujer dijo cosas como: "Veo que vas a hacer un viaje, y esto va a suceder y eso va a suceder".
Ciertamente es cierto que el Espíritu de Dios puede dar una premonición a una persona. Por ejemplo, cuando Pablo abordó ese barco con destino a Roma, dijo: "Señores, percibo que este viaje será con mucho daño y mucha perdida..." (Hechos 27:10). Esa advertencia, mi hermano y hermana, fue del Espíritu de Dios.
También es cierto que algunas manifestaciones psíquicas funcionan de manera similar a los dones del Espíritu. Es cierto que cuando el Espíritu de Dios está operando en mí, a veces tengo que tocar a las personas, como lo hizo esta mujer, para que los dones operen. Pero la cuestión es: ¿de dónde vino el don y para qué se utiliza?
¿Es solo algo con lo que jugar, o es de la Palabra de Dios? ¿Dirige a la gente a adorar, los lleva a Jesús y les hace reverenciar a Dios, o este regalo funciona para cualquiera, algún viejo borracho, borracho, chupa-cigarros, masticador de puros o jugador? Si es así, no es Dios.
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